Maestro

Al ir pensando
sobre la injusta vida
y el olvido a quien con dedicación
nos dio su vida….

En paso lento ví a lo lejos
a mí querido profesor
y corrí al noble encuentro,
de un ayer que fue mejor
y una realidad que empeoró.

Maestro, eres tú mi amigo eterno
a quién mucho le debo
todo lo que soy.

En tu rostro están las promesas muertas
y cada día la ingratitud se acrecienta

El tiempo no mata
el olvido solo lo aparta

Llevas tu pobreza con honor
y veo que tus ojos se nublan de tristeza
pero sabe Dios que penas aquejas.

Tu alegría es saber que

tus niños hoy triunfan

Tú sabrás morir con dicha
por que aunque estés vencido por el tiempo
tú sigues en pie de lucha.